Gesto es un derivado de la noción de gestus de Brecht, que en inglés suena como justicia. El gestus les permite a los actores y a las audiencias considerar cómo las normas estándar de motivación psicológica de la acción de un personaje pueden ser dislocadas y re-enmarcadas como una decisión política durante la performance.

Un gesto hace visible un conjunto de relaciones sociales que se extienden más allá de la performance.

Un gesto muestra el potencial de la agencia política o social más allá del marco de la performance, para los actores y también para el público como un colectivo.

Tanto con Electronic Disturbance Theater 2.0/b.a.n.g. lab, como con otros proyectos en los que hemos estado involucrado, la meta siempre ha sido extender la idea del gesto también a realización de e interacción con la relación social entre cuerpos-datos y cuerpos-reales.

En el centro del gesto está el potencial de un cuerpo o varios cuerpos de crear nuevos tipos de agencia e intervenciones sociales. Estas pueden agregarse a conjuntos establecidos de relaciones sociales históricas para alterar o impugnar aquellas que en apariencia han sido predeterminadas por narrativas en el escenario, las calles o las redes.

Un gesto permite que esta doble lectura se active más allá de su propia puesta en escena.